La nueva Ley de Industria 2025 impulsa la fabricación inteligente y la digitalización industrial en España

El sector industrial español entra en una nueva etapa con la aprobación de la Ley de Industria 2025, una normativa renovada que pone el foco en la modernización del tejido productivo, la digitalización de los procesos y la apuesta decidida por la autonomía tecnológica.
Con esta reforma, el Gobierno de España busca incrementar el peso de la industria en el PIB, fomentar la adopción de tecnologías avanzadas —como la inteligencia artificial, la robótica y el Internet de las Cosas— y garantizar la seguridad de las cadenas de suministro en un contexto económico global marcado por la incertidumbre.
Una ley pensada para los retos de la industria 4.0
La nueva Ley de Industria sustituye a la anterior legislación de 1992 y responde a las necesidades actuales de las empresas industriales: transición digital, sostenibilidad, eficiencia energética y competitividad internacional.
Entre los elementos más destacados de esta reforma normativa se incluyen:
Fomento de la inversión en fabricación inteligente, automatización y tecnologías habilitadoras.
Impulso a la industria 4.0 mediante incentivos directos para digitalizar procesos productivos.
Refuerzo de la colaboración público-privada, facilitando el acceso a financiación nacional y europea.
Creación de la Reserva Estratégica de Capacidades Nacionales de Producción Industrial (RECAPI) para garantizar el abastecimiento de bienes esenciales.
Apoyo específico a la industria electrointensiva, clave para sectores como la siderurgia, la química o el cemento.
Oportunidades para quienes apuestan por la digitalización industrial
La nueva ley abre un escenario especialmente favorable para las empresas y startups que desarrollan soluciones en el ámbito de la fabricación inteligente, la automatización industrial o la ciberindustria.
Algunas de las oportunidades clave son:
Acceso a fondos públicos para proyectos de innovación tecnológica.
Mayor respaldo institucional para iniciativas que incorporen inteligencia artificial, robótica colaborativa o gemelos digitales.
Ampliación del modelo PERTE, lo que permitirá seguir financiando sectores estratégicos como la movilidad sostenible, la biotecnología o la microelectrónica más allá del Plan de Recuperación.
Un marco estable para innovar en España
Para evitar la deslocalización de la producción industrial, la normativa establece condiciones estrictas: las empresas que reciban más de 3 millones de euros en ayudas públicas deberán devolverlas si trasladan su actividad fuera de la zona euro y reducen significativamente plantilla o capacidad productiva.
Este punto refuerza la idea de una industria nacional innovadora, resiliente y con capacidad de crecimiento sostenible en el tiempo.
Clave para el ecosistema de la fabricación avanzada
Desde Fidelia, consideramos que esta Ley de Industria 2025 supone un impulso decisivo para consolidar un ecosistema industrial inteligente en España. Las nuevas herramientas legales y financieras permitirán acelerar el desarrollo de soluciones tecnológicas en sectores estratégicos y reforzar la competitividad de nuestras empresas en los mercados globales.